Zaki Magoa, se mete en su papel de mago para poder llevar alegría a los niños en barrios vulnerables de Honduras. Con su noble labor ha logrado ayudar a varios jóvenes y familias hondureñas que más lo necesitan.
Cuando el mago vino a Honduras nunca imaginó que se quedaría enamorado de este bello país. Además, encontró una gran oportunidad para marcar la diferencia en la vida de varias personas.
Zaki Magoa y su labor
Su nombre de pila es Agustín Villalba y es originario de Bilbao. Actualmente tiene más de 30 años ejerciendo su profesión de mago y llevando felicidad a cientos de personas en toda Latinoamérica.
Su labor comenzó desde que viajó a un congreso de magia en “Flasoma”, en donde le surgió la brillante idea de llevar estos espectáculos a barrios periféricos.
Zaki reside en el barrio de Monterrey de Tegucigalpa, en donde coopera en ACOES Honduras y tienen tres escuelas grandes, 18 guarderías en las zonas más desfavorecidas del país y centros de ancianos.
Pero eso no es todo, ya que también apoya a varias familias a pagar los gastos escolares de niños, la renta de jóvenes universitarios con gran potencial y ha llevado a grupos de jóvenes a conocer el mar por primera vez.
Él suele definirse a sí mismo como una persona que lucha por conseguir sus sueños, pero lo único que realmente desea este noble mago es poder ayudar a las personas a cumplir los suyos.
Cada vez que escucha que alguien necesita ayuda, Zaki Magoa no duda en asistirlo y para lograrlo, realiza una campaña en España para recaudar dinero y también pone del suyo.